Galliano para Dior, vestido negro en tafetán y seda. Periodo Elizabeth

lunes, 31 de enero de 2011

Estos zapatos me hacen daño... pero me encantan


Si lo piensas, para dormir solo necesitamos la cama en la habitación, el resto del espacio puede ser para todos tus zapatos. Con “el resto del espacio” me refiero a cualquier espacio de toda tu casa. Incluida la cocina.
Y esto es lo que ocurre cuando una se va volviendo loca. Imagina que te encanta comer pasteles, pues a mí me pasa igual pero con estas maravillas, lo que pasa es que los pasteles se comen y “desaparecen”, los zapatos, sin embargo, se van acumulando.

Por si alguien se perdió la última colección del italiano Gianvito Rossi, la sutil e increíble “Colección de Carbono”, aquí tenéis un ejemplo de la sandalia por excelencia.
Resultado de un magnífico acabado son estas sandalias de aguja en piel de avestruz con fibra de carbono único. 
 http://www.gianvitorossi.com/

Si hablamos de culpables, no puedo dejar pasar al maestro Blahnik; creadores como él son los que de verdad tienen la culpa de mi pasión por los zapatos. Es inevitable no adorar lo que hacen.
Todas quedamos, de una manera o de otra, impactadas por ese return de las botas de pelo. Más aún en la alta zapatería, en la que Manolo también formó parte.

Aún así, seguimos siendo fieles a sus sandalias, a sus zapatos, a sus botines… bueno, a todo lo que haga. Buen ejemplo de ello, son estos zapatos de piel de una de sus últimas colecciones, Greece, un zapatito más que digno llamado Brutalita.



                   · Los siguientes zapatos a mostrar, unas sandalias de escándalo de la colección primavera/verano de 2011 de Emilio Pucci, así que ya sabemos qué hay que llevar para este veranito. Una colección que la propia casa define como “el armario del viajero”. Elige para sus vestidos azules y blancos, inspirados en la arquitectura de las Cícladas griegas acentuado, cómo no, unas sandalias hechas a mano en bronceado natural, oscurecidas por el sol hasta el marrón, adornadas con metal, piedras turquesas y lapislázuli.
Una colección muy rica en complementos que, por cierto, “me quita el sentío”.





Podría elegir muchísimos zapatos de los míticos Dolce&Gabbana, pero continuo en mi línea clásica. Los zapatos de tela me gustan mucho, y si su acabado es en satén con detalle en forma de flor, mucho mejor.

(Colección D&G Spring/Summer 2011)













Otra colección a destacar, y mucho, es la propuesta por Galliano, también para este verano de 2011. Su diseño, la variedad de colores, su intrincado diseño de rayas y redes de peep toe, el impactante tacón aguja y la plataforma, que, atención al detalle, si os fijáis en la imagen siguiente, justo en el realce de la suela aparece un trocito de periódico, simulando una crónica impresa en el mismo zapato.




Dada mi devoción por los zapatos, y más por los zapatos rojos, no podía faltar mi homenaje a McQueen,  con estos pump-shoes rojos con cristales de swarovski incrustados.

Estos  peep-toe con plataforma camuflada los diseñó para su colección primavera/verano de 2009.
Mi más sincero deseo de que un espíritu como el suyo no se pierda nunca, y que la moda lo guarde.


A McQueen, el gran McQueen

domingo, 30 de enero de 2011

Bonjour, mon amour





Hacemos un parón espiritual para tomar aire y respirar, chica, hay que esperar para que llegue, pero cuando pasa, pensamos que siete días es poco para una semana de moda en Paris.
Son muchos los detalles a destacar, pero voy a repasar lo más llamativo de todo.

Llamativo y habitual resulta el siempre impecable trabajo de Galliano, que en esta última demostración de su arte ha dejado en un punto y aparte al mítico Givenchy, e incluso a Lanvin. El gibraltareño no solo desmarca en moda femenina, sino también en la masculina.
Volúmenes cubistas, confecciones retro muy elegantes y femeninas; la casa Dior se adelanta de nuevo en un primer plano.
Fiel a sandalias de tacón y plataforma, faldas tubo, vestidos globo y sutiles escotes, por supuesto también magníficos tocados.
Gaultier, que al igual que Galliano, desfiló esta pasada Semana de la Moda en Paris. Además comparte con Galliano, por no decir que entre ambas casas se lo rifan, al jovencísimo modelo bosnio de 19 añitos, Andrej Pejic, quien por cierto cerró el desfile de Jean Paul vestido con un traje de novia, velo púrpura y guantes negros. Al parecer, Andrej, está revolucionando el concepto de desfile, ya que por sus rasgos andróginos forma parte del femenino top model show, sin ser una mujer.
Hace unas semanas, también, fue elegido para protagonizar una campaña con Marc Jacobs.

Igual de andróginos resultaban los diseños de Gaultier en el desfile masculino Primavera/Verano 20011/2012, ya que muchas de esas prendas adoptaban resabios de la propia moda femenina. Texturas llamativas, detalles en cuero, y cero over-size, más bien todo es muy justo, tanto que incluso sobresalen las prendas inferiores.

Muy diferente resultó ser la colección de Armani, quién se decidió mas por el rollo futurista, los sombreros en forma de platillos volantes y tejidos llamativos y fluorescentes. Minivestidos palabra de honor y corte básico. El italiano sigue prefiriendo poner plataformas…
Para la noche, vestidos largos muy Armani, tocados brillantes e incómodos velos con cristales.
Hubo mucha más alta costura, como la de los destacados Alexander Vauthier y C.Josse, quienes optaron también por los vestidos de noche largos.
Muchos de todos estos vestidos podremos verlos dentro de nada sobre la alfombra roja de los Oscars.

Mucho Paris, y mucho amour para todos.

Encendiendo el horno


Mi más sincera bienvenida a La Voguería, una pequeñísima ventana donde revelar las últimas tendencias recién sacadas del horno. Calentitas, calentitas.

Es evidente que estos tiempos que corren son difíciles para todos, y para nada es cierto que la industria de la moda diera la espalda a este problema global. Continúa luchando y renovándose continuamente. Innova, crea, viste y nos hace soñar.
Son infinitas las propuestas para este nuevo año, y para esta década que, aún al principio, ya forma parte de la historia mundial. Historia para no olvidar.
Se han hecho historia y leyenda sobre muchos diseñadores (como el gran McQueen), obras de alta costura para la posteridad, eventos y personas influyentes en la moda, los grandes referentes y los mitos.

Creo que no podía ser de otra manera, que empezar este blog hablando sobre un complemento actualmente imprescindible para marcar un estilo propio; el tocado.
Son muchas las que deciden dar un toque elegante a su estilismo con un pequeño detalle, tal vez algún tipo de lazo vintage o arreglo de plumas, o simplemente captar la atención de todo aquel que le contemple, acentuando su ser con algo enorme en la cabeza. Y cuando digo enorme, digo llevar tamaño macetero de planta de exterior.

Uno de los diseñadores mas recurridos para este tipo de trabajos es el londinense Philip Treacy (http://www.philiptreacy.co.uk/), quien sacó su última colección de otoño/invierno para este año 2011. Un poco de todo, muy estilo inglés contemporáneo;  tocados, sombreros y bolsos para ella, sombreros para él.
Absolutamente imprescindible si lo que buscas es un sombrero, una pamela, un bombín, o cualquier versión existente del tocado. Plumas, tejidos brillantes y arreglos en pedrería.

 

Es más que comentado su colaboración con Sarah Jessica Parker en innumerables ocasiones, quién fiel a sus diseños no ha tenido, ni mucho menos, reparo en lucirlos siempre que la situación se precie (Imagen Premier Sex & The City, Londres).
De todos es sabido el mal trago que pasó la actriz el día que durante el rodaje de la primera entrega de la película de Sexo en Nueva York, le negaron llevarse el famoso “headpiece” de “El pájaro paraíso” vintage de plumas azuladas (by http://newyorkvintage.com/) que lució como complemento vestida de novia durante la secuencia del mega-plantón.

Actrices, cantantes, fashionistas… Parker, Anna dello Russo, quien luce en la siguiente imagen (izquierda) con un “ball gown” de Pucci y un fabuloso tocado de Gareth Pugh, o la gran Gaga (derecha), con antifaz, también, de Philip Treacy.




Chica, me quedo muerta, me chifla. Si ahora visitase una granja, creo que empezaría a mirar de otra forma a todas las gallinas. Y a cualquier cosa que se mueva y lleve plumas