El sábado pasado arrancaba la São Paulo Fashion Week, que actualmente celebra su 30 edición, se ha convertido en una plataforma de gran proyección para las más de 30 firmas que participan. Es la más prestigiosa Semana de la moda en Latinoamérica y una de las más prestigiosas del mundo junto a las de Nueva York, París, Milán y Londres. Se realiza dos veces al año en la ciudad brasileña de São Paulo, y en los primeros años su nombre fue Morumbi Fashion.
Este año, con invitados tales como Ashton Kutcher, Christina Aguilera y Paris Hilton, entre otros… Como curiosidad añadiré sobre ésta última que ella fue la encargada de inaugurar el primer día de esta semana de la moda apareciendo en el desfile como modelo de la firma Triton, y acudió acompañada por su pareja actual Cy Waits.
Ashton Kutcher modelará diseños de la colección Invierno 2011, de la firma Colcci, que en su parte femenina presentará como modelo estelar a la brasileña Gisele Bundchen.
Los desfiles masculinos de los diseñadores Joao Pimenta y Alexandre Herchcovitch, con osadas tendencias para el invierno-otoño, marcaron el final de la Semana de la Moda de Sao Paulo, que concluyó ayer después de seis días en la Bienal de Ibirapuera.
La presentación de Alexander Herchcovitch, el más famoso de los diseñadores brasileños en el mundo internacional de la moda, se inspiró en el hombre "pos apocalíptico", con una serie de atuendos y complementos de estilo osado. Muy en su línea.
En los últimos desfiles femeninos del llamado Sao Paulo Fashion Week, André Lima apostó en el estilo surrealista, con sombreros y plumas, en los que destacaron las piezas de cintura baja, hombros bien marcados y larguras diferentes.
La colección de Fernanda Yamamoto, a su vez, mezcló diversos colores bajo una técnica japonesa y accesorios pulidos, como los sombreros de acrílico y las formas circulares para recortar mangas.
En el primer desfile, Gloria Coelho recordó los años noventa y para ello tuvo como estandarte al personaje animado japonés Pokemon, el preferido del hijo de la diseñadora.
Para el último de los desfiles, el de la marca Cavalera, el diseñador Alberto Hiar sorprendió al cambiar la pasarela tradicional por una de agua dispuesta en la entrada del predio cultural proyectado por el arquitecto brasileño Óscar Niemeyer.La lluvia artificial se combinó con el negro predominante, el rojo y el amarillo de materiales como la lana y el cuero, un espectáculo fabuloso en todos los sentidos.
La moda brasileña nos sorprende rompiendo con los patrones del resto de las ediciones, donde en la tierra de la samba, apuestan para este año por la oscuridad:siempre negro.
